En el futuro
Nadie me recordará,
A ti tampoco.
Acordémonos
De los dos hoy nosotros,
Y a distancia.
Resulta duro
Asumir que no somos
una promesa.
De nuestro ayer
Somos la fácil presa
Sin reluctancia.
Lo que no fuimos
Ya jamás lo seremos,
Maldita suerte.
Cada semana
Más cercana la muerte
Siento que está.
Estar al día,
Vivir en el presente
Ya nos aburre
Sin esperanza
Ni juventud la vida
Transcurre lenta
Es imposible
Volver a un pasado del
Que me desprendí.
De nuestro hijo
Añoro esas risas
Que yo me perdí.
No es un niño
Ya, pero a veces ríe
Y tú también.
Te veo tan linda
Aún hoy, todavía,
En tu mirada.
Pero te engaño
Con la que fuiste hace
Ya treinta años.
Cuando sólo con
Mirarte a los ojos
Ya te excitabas.
Cuando eras tú,
Pura y fría y eso a
Mí me gustaba.
¿Porqué me importa
Lo que nosotros fuimos
Y lo que no soy?
Ahora pararé
De pensar en nosotros,
Y de pensar.
Voy a saborear
El Sol de esta tarde
Para vivir hoy.
La muerte es,
ResponderEliminarel pasado que nunca fue presente
el futuro que nunca llegará.
Porque intentar olvidar el pasado?
ResponderEliminarLa joven sigue viva en el corazón de su marido envejecido.
Por lo tanto no cree engañar la, sino la quiere como al primer día.
Seguir queriendo alguien cuando era joven no significa no amar esa persona cuando ya es vieja.
El problema surge si el amor de las personas desaparece con la edad (entonces si que no tiene sentido). Pero eso significa que uno mismo no asuma su edad...
El haiku "Pero te engaño
ResponderEliminarCon la que fuiste hace
Ya treinta años." es buenísimo. Me gusta mucho.